Párate un momento y piensa: ¿cuántos cuadros pintados por mujeres has podido admirar durante tus últimas visitas a un museo o una galería? Seguramente te cueste recordarlo y, si lo recordaras, quizá la respuesta fuera uno o ninguno. Artistas haberlas, haylas, como dirían los gallegos, pero después de siglos de invisibilización la paridad continúa siendo un objetivo a cumplir.
Las mujeres sólo ocupan el 27% de los catálogos de las galerías
y el precio de sus obras es menor. Visto lo visto, ser mujer y
dedicarse al arte es casi misión imposible.
La historia es
amplia en ejemplos de grandes artistas que han sido ninguneadas y
condenadas al olvido, pese a su gran aportación. Ni siquiera han
contado con el apoyo de sus compañeros de profesión, que han
colaborado en este ostracismo.
Pero puede haber algo que es casi peor que el olvido, que es el
hecho de ser silenciada.
En la práctica las artistas siguen
siendo relegadas en eventos menores para cumplir esa cuota legal de
paridad y no se las dota de las mismas oportunidades que a los
hombres. ¿La solución está entonces en hacer una distinción entre arte
masculino y femenino?
La mujer sigue siendo reivindicada como musa, pero no como
artista.
Este será el hilo conductor de la Gala Con M de Mujer
que organiza la Concejalía de Mujer e Igualdad del Ayuntamiento de La
Palma del Condado con motivo del Día Internacional de la Mujer.
Actuaciones, testimonios y arte. Eso sí, Arte de Mujeres. Entrada
libre hasta completar aforo.